Son parte de la escena gastronómica porteña. Se caracterizan por ofrecer platos sabrosos y de calidad, sin olvidar la calidez en el trato y su fiel estilo casero. Acá te contamos cuáles son los más destacados de la ciudad, que no se pueden dejar de conocer.
Los bodegones porteños -modestos, auténticos, tan históricos como fieles a la esencia de los barrios que habitan-, son magia para los comensales que llegan en busca de aquello que los distingue: excelentes precios, porciones gigantes para compartir, personajes entrañables, austeridad y la calidad de siempre.
Entre las joyas que se pueden encontrar en la carta están las tradicionales minutas, carnes y pastas, platos clásicos -y muchas veces olvidados por las nuevas tendencias foodies-. De la mano de la impronta tanguera y futbolera, varios de ellos esconden entre sus paredes historias familiares de inmigrantes y recetas maravillosas, que sobrevivieron de generación en generación.
Los bodegones son una parada imperdible para cualquier amante de la buena cocina. Se trata de una fórmula que no falla: estilo casero, platos tradicionales y abundantes, hospitalidad, calidad y precios accesibles. Acá te dejamos una selección exquisita para saborear la ciudad.
El Ferroviario
Casi debajo de la Autopista Perito Moreno, también conocido como “Bodegón Vélez Sarsfield”, este restaurante-parrilla es un clásico de Liniers. Está ubicado en terrenos donde funcionaban los antiguos talleres ferroviarios y fue reconvertido hasta distinguirse -con el paso del tiempo- en uno de los lugares preferidos por turistas y locales (“Travelers Choice 2020”). Famoso por el tamaño de sus porciones, pensadas para compartir entre tres o cuatro personas, cuentan que los cortes vacunos son los más elegidos. La especialidad de la casa es el asado ancho, pero que también se pide mucho el vacío y la entraña, junto al hit de la casa: la provoleta. Para los vegetarianos hay una opción entre las brasas: la parrillada vegana (se debe solicitar con anticipación o esperar a que se cocine porque se hace a pedido). Además, todos los días sirven lechón, chivito, cordero, milanesas o pastas caseras. Es imposible dejar de mencionar el matambre con ensalada rusa, su cordero al disco y el arroz con leche bien argentino.
Av. Reservistas Argentinos 219, Liniers (CABA).
Tel: +54 11 4644-2360
Rotisería Miramar
En pleno barrio de San Cristóbal se encuentra otro de los bodegones más destacados de Buenos Aires. Es un emblema por la calidad, la variedad de sus comidas y su carta de vinos. Está justo en la vieja esquina de San Juan y Sarandí, donde funcionó en sus comienzos como rotisería y despacho de bebidas. Su historia es curiosa, ya que antes fue una famosa fábrica de sombreros, donde Carlos Gardel compraba los suyos. Unos años después, los primos Ramos se unen para crear Miramar (nombre que no tiene más explicación de que por esos años había otra reconocida rotisería que se llamaba Mar del Plata). Decorado con objetos de época, ventanales antiguos y una gran barra de madera, Miramar es un viaje en el tiempo. También hay jamones colgando del techo, carteles publicitarios de los 50 y muchas botellas de vino, para completar el cálido ambiente, bien porteño. Si hablamos de platos: la tortilla española se lleva todas las miradas; es recomendable probar sus mariscos y fiambres, y clásicos olvidados como rabo de toro con papas y caracoles con salsa de tomate. Su plato estrella es el pollo al spiedo. A su famosa Picada Miramar, a la que se agregan lechón, matambre y leberwurst, boquerones y lengua a la vinagreta, es una bomba. Las picadas pueden pedirse para uno, dos o tres comensales. Bien típico de bodegón.
Av. San Juan 1999, San Cristóbal (CABA)
Tel: +541143044261
El Obrero
Ubicado en el histórico barrio de La Boca, a pocos metros de la Usina del Arte, este colorido lugar de comidas nació en medio de una zona fabril, como una fonda, que tenía de clientes a los obreros de las fábricas de La Boca. Distinguido como Sitio de Interés Cultural de la Ciudad de Buenos Aires, no perdió para nada su esencia. En sus mesas comieron estibadores y operarios, oficinistas y familias, turistas y celebridades. Su cocina supo amalgamar el menú criollo con la tradición española e italiana. Creado por el inmigrante asturiano Marcelino Castro, hoy su hija Silvia mantiene la impronta de un lugar icónico de Buenos Aires. Desde 1954 junta sobre sus paredes las fotos de todos sus famosos comensales. En los años 90 se convirtió en el elegido por el turismo internacional. Vinieron a comer a “El obrero” el príncipe de Mónaco, Bono, Susan Sarandon, Francis Ford Coppola, Diego Maradona, Tim Robbins, Daniel Barenboim, entre otras personalidades. La suculenta milanesa de ternera napolitana con papas fritas, una porción de rabas crocantes y una tortilla española bien “babé”, son los platos más legendarios, que hicieron conocido en todo el mundo a este bastión xeneize genovés que luego de su cierre reabrió sus puertas para la alegría de los buenos comensales.
Agustín Caffarena 64, La Boca (CABA).
Tel: +54 11 4362-9912
Horario: De 12 a 16 y 20 al cierre – Domingos cerrado
Spiagge Di Napoli
Para los amantes de las pastas, aquí está el bodegón indicado, porque son su especializadad. Un lugar en pleno Boedo tiene una enorme variedad de opciones de salsas para pedir. Hace un millón de años alimenta a un montón de gente. Sus fucciles con estofado son un punto fundamental en su carta de pastas. El plato es muy abundante, la carne del estofado estaba perfecta y los fideos al dente. También hay caracoles, para quién tenga el deseo de semejante epopeya. Los sorrentinos verdes con crema es otra especialidad de la casa. Para el momento del postre, el flan mixto no defrauda. La Copa de la Nonna es furor en este bodegón porteño. Viene con canela, chocolate rallado, vainilla, queso mascarpone, postre chocolate, dulce de leche y postre de vainilla. Capa tras capa de sabor. Si estás por la zona o tenés ganas de hacer una salida distinta y comer bien, este es el lugar indicado.
Dirección: Av. Independencia 3527, Boedo (CABA)
Teléfono: +5411 4931-4420
Horario: Lunes a Sábado Mediodía y Noche. Domingo Mediodía
Barcelona Asturias
Con precios de locos, Barcelona Asturias es un auténtico bodegón: bueno, bonito y barato. Ofrece cocina casera, porciones grandes para compartir. Está ubicado en Av. Córdoba y Ravignani, justo en la esquina, en el límite entre Chacarita, Colegiales y Palermo. Antes de ser bodegón, Barcelona Asturias era un bar al que un grupo de jóvenes le cambió la cara y hoy ofrecen opciones económicas, caseras y tradicionales. Sus platos más emblemáticos son: la Tortilla Española tipo babe (es la niña bonita de este lugar) y los Sorrentinos con estofado (bien cargados de queso y con el adicional de estofado que se paga aparte por $50 pesos nada más). Es recomendable no dejar de probar el Pastel de papas, una comida tan sabrosa y clásica, como sencilla y contundente. La milanesa napolitana no se queda atrás: se puede compartir entre dos o tres personas, se sirve con papas fritas (ideal a caballo). También se destaca por su Lomo a la pimienta y su Carne al horno con papas españolas. Los postres son impresionantes: La Copa Chocotorta y la Copa Oreo. Y algo más clásico: Tarantela con dulce de leche. Cuenta con opción delivery por teléfono o a través de Pedidos Ya y Rappi.
Dirección: Av. Córdoba 5895 (CABA)
Teléfono: +54 11 4776 2882
Horario: lunes a domingos de 08:00 horas a 00:30.
Lo ideal es llamar y realizar una reserva previamente, ya que suelen ser muy concurridos. Si bien muchos quedaron afuera en esta selección, porque sería imposible nombrar a todos los grandes bodegones de Buenos Aires, es un buen mapa para comenzar el recorrido.
