Pechito, con el Toyota GR010-Hypercar, sumó su segundo campeonato mundial de la categoría en las 8 horas de Bahrein. El ganador de la carrera fue el suizo Sebastien Buemi, pero a Pechito, con su segundo puesto, le fue suficiente para ser el campeón.
El autódromo de Sakhir, en Bahrein, fue el escenario donde el equipo Toyota de Buemi superó al del argentino. Asimismo, Toyota anunció importantes modificaciones para la temporada 2022: el japonés Kamui Kobayashi fue nombrado director del Toyota Gazoo Racing, pero seguirá siendo piloto de uno de los dos híbridos de la marca, junto a López y a Mike Conway. De esta manera, se mantiene el trío que se consagró este año ganador de las 24 horas de Le Mans.
La competencia
Pechito, siempre*
En una entrevista exclusiva desde Europa, Pechito López desgrana su vida deportiva. El bicampeón mundial, que no se detiene ante nada, narra los sinsabores y alegrías de su carrera y reconoce que el esfuerzo y la imposición de metas son el reaseguro del triunfo.
La vuelta de Europa (2007) dejó un sabor amargo tras la salida del Programa Renault. ¿Qué te llevó a pensar en el retiro del automovilismo, siendo tan joven aún?
Fue muy duro para mí, en esa época, entender algunas cosas del Automovilismo. Ver que pilotos con menos o iguales condiciones llegaban a la Fórmula 1 y yo no, tener que volverme a la Argentina ese sueño frustrado, como era para mí llegar a la Fórmula 1 me hizo perder la motivación y, durante un tiempo, también perdí algo de la pasión por el automovilismo.
¿Qué importancia tuvo el automovilismo argentino en tu reinvención como piloto?
Fue clave para mi carrera. Primero, porque empecé a disfrutar de nuevo de las carreras y recuperar esa pasión que había perdido. También me enseñó mucho a correr en carreras de autos con techo, algo que luego sería muy importante en mi paso por el Campeonato Mundial de Turismo.
¿Te imaginabas que el BMW de la Copa Mundial de Turismo (WTCC) y la sensación que generaste en Citroën desde esa carrera en Termas 2013 iban a significar tu renacer como piloto en Europa?
Nunca imaginé podría volver a Europa. Pasó mucho tiempo y también tengo que decir que estaba muy contento y feliz de correr en Argentina. Pero había algo dentro de mí que me decía que quería volver a Europa a demostrar lo que valía. Eso hizo que intentara volver cada vez que aparecía una oportunidad. Y eso se dio cuando pude correr la carrera del WTCC en Termas. Ni en mis mejores sueños imaginé que todo iba a resultar así. Ganar y, gracias a eso, llamar la atención del equipo Citroën, que en ese momento buscaba un tercer piloto para su equipo, junto a Ivan Müller y Sebastien Loeb.
¿Qué protagonismo tuvo tu papá en tu vuelta a Europa?
Mi papá fue muy importante en toda mi carrera y, en este caso, fue vital, ya que siempre creyó que yo estaba para cosas más grandes y que tenía que volver a Europa. Él fue el que empujó cada vez que había una oportunidad para volver a competir allá.
¿Cómo llega Toyota a tu carrera, en pleno furor por los títulos con Citroën?
Toyota llega de una manera especial. Mi sueño siempre fue correr las 24 horas de Le Mans y pelear por la victoria general. Siempre lo busqué. Después de tres años con tantas alegrías en el WTCC y tres campeonatos mundiales, había algo todavía dentro de mí que creía que podía seguir mejorando y compitiendo por carreras más grandes y con pilotos de F1.
Así fue como conseguimos hacer una prueba de eliminación que hizo Toyota con doce pilotos más, de F1 y ex F1 y de categorías muy importantes en Europa. En ese entonces, Toyota planeaba hacer el tercer auto para las 24 horas de Le Mans y estaban buscando un piloto que remplazara Alexander Wurz, que se retiraba. La prueba fue muy dura, pero logré ganarla y quedar como piloto de Toyota para el Campeonato Mundial de resistencia y las 24 horasa de Le Mans, en la máxima categoría.
¿Le Mans es la carrera mítica que todo piloto quiere ganar? ¿Qué tiene de especial?
Es muy especial. Es mítica, dura, cruel, fascinante al mismo tiempo. Es única en el mundo, por eso todo piloto quiere correrla y muchos lo han intentado sin éxito. Es la carrera más grande del mundo.
¿Cómo se prepara un equipo y el piloto para una carrera de esta naturaleza?
Se empieza a preparar apenas termina. Es una preparación de un año donde el auto se desarrolla y nace pensando en las 24 horas. Muchos kilómetros de pruebas… Días y noches de pruebas… Es una preparación muy dura.
Se dice que las 24 horas de Le Mans se ganan a la noche ¿Por qué? A vos se te vio muy firme en tus turnos nocturnos. ¿Hiciste algún trabajo especial en la previa pensando en la noche?
La parte más dura de la carrera es la noche. Las bajas temperaturas, poca visibilidad, el tráfico deciden si se pierde o se gana la carrera. Siempre me sentí cómodo en estas condiciones y este año, en especial, pude marcar una diferencia importante que nos permitió llegar a la madrugada con tranquilidad y diferencia. Fue una responsabilidad muy grande que me dio el equipo, y siempre digo que en esos momentos uno tiene la posibilidad de demostrar… Pero es cierto que, en esas condiciones, podés pasar de rey a mendigo en un segundo.
¿Qué características especiales tiene este nuevo Hypercar GR010 Hybrid que te llevó a la victoria en Le Mans?
El GR010 es el primer Hypercar de Toyota para este nuevo reglamento. Es un auto híbrido: cuenta con un motor eléctrico en el tren delantero y el de combustión en el tren trasero. Estos dos se complementan para llegar a un poco más de 700bhp. Para Toyota es muy importante que todo el desarrollo que se ve en este auto es trasladado a todos los autos híbridos de Toyota que vemos por las calles.
Conociendo el automovilismo argentino, ¿qué otro piloto nacional podría tener lugar en el Campeonato Mundial de Resistencia? ¿O qué debería trabajar un piloto argentino para tener un lugar en ese tipo de automovilismo?
Siempre dije, y no es algo nuevo, que el nivel de pilotos en Argentina es muy alto. Tenemos un automovilismo interno muy fuerte. Pero para llegar a Europa no basta con las condiciones solamente, hay muchas cosas, hay que saber y ser fuerte, ya que se está lejos de todo lo que uno quiere, de los seres queridos, y no todo el mundo lo puede hacer. Además de eso, el idioma, la preparación física, el conocimiento técnico, el profesionalismo, la dedicación, la responsabilidad, entre otras cosas, son muy muy importantes.
Pensando en el futuro, ¿qué nuevo desafío te planteás? ¿Te atrae el automovilismo norteamericano? ¿Harías un cambio drástico a esta altura de tu carrera, pensando en cambiar nuevamente a autos de fórmula, por ejemplo?
Siempre hay desafíos y metas nuevas, pero en esta etapa de mi carrera y sobre todo después de ganar las 24 horas de Le Mans, alcancé el máximo que uno puede soñar como piloto. Por ahora, quiero disfrutar de este momento y del automovilismo a este nivel por más años. Ahora, si no siento que tenga que buscar algo más, estoy bien donde estoy y todo lo que sea competir arriba de un auto de carrera es lo que quiero hacer.
*Este reportaje fue realizado días antes de la consagración de José María López en Bahrein, campeón mundial por segunda vez (N de R).
